jueves, 20 de noviembre de 2008

xDDD a partir de ahora

pablo dejo constancia de mis intenciones

(esto no es una insinuación) acompañará a todas mis frases no insinuadas.

lo prohibido

Vivir para descubrir, cambiar para sobrevivir, mirar tu pasado siempre con alardeo de superioridad, siempre pensado que ahora no cometerías los mismo errores que llegaste a cometer. Creer siempre que te encuentras en el clímax de tu vida.. Conseguir aniquilar una parte de tu naturaleza tras muchos esfuerzos.. para finalmente luchar para volver a conseguirla.
Fantasear con lo prohibido, tu único sueño. Ensalzarte, tu presente.. y proponer mejorar.. tu futuro.
Pero.. ¿cómo volver a aquello que has decidido abandonar?. Primero deseas ilusión, poder conseguir llorar como lo hacías antes, caer rendido ante todo.. poder soñar. Después poder conseguir aquello que ahora sabes que no podrías sobrellevar.. y volver a equivocarte.
Intentar en unos pocos días anhelar lo que nunca has querido y desear con toda tu alma aquello que nunca has podido ambicionar y que siempre has criticado.. aquello que siempre te ha hecho ajeno. Para después de creer que lo has conseguido todo, volver a sentirte equivocado y volver a pensar que nunca más te ocurrirá.
Inseguridad como estimulante, prohibición como apasionante y necesidad de lo impracticable para nunca conseguir nada y continuar tu vida cotidiana.. Siempre creer que has aprendido, pero sin embargo desear cometer los mismo errores. Darte cuenta de tu inmadurez y enorgullecerte de poseerla.
Vivir para descubrir que nunca conseguirás lo que deseas, porque para ello deberías salir de tu novela y vivir como alguien normal. Dejar de desear lo imposible es ilusorio para ti. Pues ese es tu verdadero motor realmente.
Todo lo que deseas tocar ha de ser intocable porque si consigues tocarlo se alejará de tu excitación. Dejarás de desearlo.. Tan rápido como eso ocurra, en el mismo instante.. en el mismo momento.. todo se apagará.
Desear tu deseos.. y conseguir ser el deseo que deseas poseer...
Intentar ser inaccesible para poder seducir y desear más. Para ti el amor no existe, pues no lo quieres.. te conformas con desear y mantener la incertidumbre encendida. Pero llevar algo a la práctica desbocaría tu divina naturaleza para desembocar en la nada. Esa es tu vida. Es tu normalidad.. Ese eres tu.

vil individuo

Almas dañinas de la sociedad, estiércol con patas.. Juzgando los hechos que consideran inmorales de sus semejantes y sin embargo fantasmas en la noche.
Ojos simples que no aciertan a ver a tres pasos de sus propios cuerpos, y que sin duda solo recaen en los detalles mas insignificantes que tientan a mirar.
Manos frías, extremidades lánguidos, corazones secos.. palabras rígidas y superiores que harían temblar a las mas exquisitas personas, que sin conocerlos se aproximan a sus garras.
Lagrimas derramadas sin sentido. Abandonos perspicaces. Almas cándidas humilladas.
Confusiones por ser un ser que nunca pudiste controlar. El amor no es algo que puedan utilizar, no es algo que se encuentre a su alcance.. no son capaces ni de querer.. solo de ansiar, desear y ante todo.. destruir.
Nadie es consciente de su condición de ser un vil individuo, pero muchos los son y de muy distintas maneras, aunque todos tienen en común la destrucción de sus próximos.
Dulces sonrisas pueden ocultarlos bajo su piel, palabras amables.. e incluso acciones desinteresadas, pero los escondites no hacen menos peligrosos a aquellos, que ni siquiera se molestan en forjarse una máscara en la que esconderse.
Algunos no son fáciles de descubrir, pero si lo haces aléjate de ellos.. aunque parezcan ángeles no son mas que mierda recién cagada por los gorrinos.

el miedo de lo irremediable

Sentir el miedo de lo irremediable, intentar no hacer lo que insensatamente sabes que vas a hacer. Sentir el dolor de lo ineludible, y ver que no eres más que aquello de lo que siempre has huido ser... Intentar escapar de lo que sientes, de tu atracción, del dolor...
Intentar no cambiar actuando en papel de quien no eres y luchando por no perderte.
Fríamente tramando un plan perfecto, que te haga conseguir lo que quieres y que forzosamente sabes que no podrás concluir bien.
Sabes que deseas algo que no sabes si quieres, pero eso no hace que se debiliten tus anhelos.
Lloras, sufres, caminas hacia las tinieblas y te propones olvidarlo todo, volver a esconderte en tu urna de cristal, para ver desde ella como estrepitosamente llega el fracaso.
Intentar decidirte a lograr lo que quieres, pero sin saber como hacerlo. Fundirte en tu naturaleza ardiente y desconfiada y querer escapar de ella.
No lograr nunca lo que deseas y atormentarte por no saber expresar lo que ambicionas.
Así que llega el día, por fin decides desistir y olvidar. Te repites mil veces que ya no sientes nada, que no vas a perseguir nada más, que tu corazón es de hielo y no necesitas a nada ni a nadie... pero es entonces cuando vuelves a ver sus ojos, sientes su mirada..., escuchas sus escasas palabras, que por mucho que luches va derritiendo y fundiendo el caparazón formado. Y es entonces cuando vuelves a sentir el miedo de lo irremediable, vuelves a intentar no hacer lo que insensatamente sabes que vas a hacer, deseas no decir las palabras no pensadas, tontas y que se escapan a tu control...
Y ves que todo esta mal, no sabes demostrar lo que sientes y no sabes olvidarlo.
Tu firme propósito de control se ve roto una y otra vez por la inconsciencia de tu ser y sientes y te reiteras que nunca conseguirás lo que quieres por mucho que lo intentes...
Para luego arrepentirte de conseguir aquello que no deseabas y lograr haber perdido lo que querías.

inocencia

Mi inocencia se perdió cuando mis huesos dieron contra el fango, cuando mi suave y dulce alma fue azotada... y donde desgarradamente agonizaron mis sueños. Cada palabra contra mi alma fue arrancándome uno de mis músculos, derramando la sangre de mi cuerpo hasta que finalmente solo quedaron mis huesos. Cuando no tienes manos, ni ojos es fácil no ver, ni tocar. Cuando te faltan las piernas y los brazos no puedes abrazar.. ni tampoco huir. Te quedas ahí si poder resguardarte, tan solo esperando a que la muerte te salve de aquello que mas odias... Cuando empiezan a entreverse tus huesos y notas que tu corazón va empequeñeciéndose, no puedes pensar en otra cosa que no sea en tu propia autodestrucción... y cuando finalmente te das cuenta de que tu corazón se ha evaporado y que tus huesos han sido arrojados a las sarnosas fauces de lobos hambrientos ¿qué te queda? Ya no eres nada, no puedes sentir, no puedes llorar por ti... no puedes intentar cambiar, porque no eres nada.. solo una tenebre luz, una energía que solo puede actuar como depredadora, para poder continuar allí. Entonces te das cuenta que no han sido robados tus huesos, que tus manos y tus pies te acompañan enraizados a tus brazos y tus piernas. Cada músculo de tu cuerpo permanece inmóvil y sujeto a ti... tan solo en tu interior notas el movimiento de un músculo, palpita por tu vida.. pero no crees que sea tu corazón, tu mismo lo has sentido evaporarse, al igual que, sí, tienes ojos, pero con ellos no ves lo mismo que con los que tenias antes.. sigues teniendo manos, pero éstas están decididas a no moverse para nada más de lo que sea necesario. Todo está igual, pero a la misma vez todo ha cambiado. Tienes un cuerpo más fuerte, pero más inerte... has perdido tus ilusiones, tus pensamientos.. has perdido parte de tu alma. Cuando te miras al espejo, solo aciertas a ver una sombra que se pone, donde antes se hallaba tu reflejo y en tus ojos no hay nada. Una triste alma fría y muerta recorre el interior de tu cuerpo... y entonces ves el mundo real. Y en ese mismo mundo real ves roto y despedazado lo que antes era tu cuerpo, tus antiguos ojos, tus manos, tus antiguos sueños... y al preguntar, tu yerta y despegada boca solo acierta a susurrarte una débil palabra con el que será su ultimo aliento... INOCENCIA.