domingo, 31 de mayo de 2009

Deja de clamar al cielo y de reescribir sonetos al alba.
Deja de caminar curvado y sostener objetos sobre tu espalda.
Deja de pensar que todo lo que siempre has creido se reduce a la nada.
Deja de ser otro y empieza a ser tú.


:) proclama palabras abstractas pero comprensibles, aturde a los pensamientos que no te dejan ver con claridad y remueve palabras que griten lo que quieres decir.
Sobre todo, sonríe.