miércoles, 20 de enero de 2010

desde hace tiempo si me permites, todo me sale genial.. me siento mas cerca de los beatles que de tus discos de jazz....

sábado, 9 de enero de 2010

La gente empezaba a ponerse nerviosa, las fichas claramente se iban dividiendo en dos poderosos bandos pero la poca gente que quedaba en la retaguardia no se rendía a la perdición. Cada jugada era un cambio de poder lo que arrastraba a los diferentes ministros y un nuevo giro inesperado que anunciaba un nuevo final. Yo me encontraba con la serenidad que te proporciona estar pensando en cosas que no tienen valor para el juego, pero con la titubeante fortaleza que me había creado para que nadie se percatase de quien era mi sino en la mesa.
Más de una y de dos veces me había jurado que no me destruiría así, y quizá agudice sentidos por el puede de no ser el detonante del mecanismo que sabía estaba esperando.
Y en ese momento me tranquilice de nuevo, aspire del aire ese perfume que podría ser o no el cálido aroma de alguna droga que quizá se desprendiese de las cortinas, (cosa descabellada, pero no tanto) y rearmé mi tropa decidiendo que me había ganado un final... así conseguí un gran final. La condescendencia de los hechos quizá fuese esa y yo así me di cuenta de que no guardaba esa tal condescendencia con nadie, pues quizá decidí en ese instante que no quería acomodarme al gusto y voluntad de mi sino.. las cosas hermosas te pasan pocas veces en la vida, a mi me da igual la victoria, pues es cada uno quien decide con que contraatacar y vencer con armas.

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A veces las personas suelen equivocarse.. quien va a negar esa gran verdad, si no se puede.. puedes vencer tus miedos un número limitado de veces hasta que llega la opción de la duda, quizás he vivido o sobrevivido demasiado y creo por bien hecho lo que la mayoría de la gente ni se plantea.
Tan solo puede que todas mis vivencias no hayan servido para nada mas que para alentarme y ayudarme a continuar con lo que me toca. Y aunque a veces pienso saber más que nadie lo más lógico sería que me equivocase pues no nací con gran rama de videncia. He escuchado miles de palabras y a la vez he visto más contra actos que me llevan a darme cuenta de lo que siempre había podido sospechar y que no es para nada alentador.
Lo tengo decidido, aquí se queda mi espada clavada en el suelo con la satisfacción de haber removido bien el terreno, no sigo cortando cabezas pues la hoja esta demasiado impregnada en sangre, y no toda es del enemigo..

y eso que dicen que la gente no cambia.. entonces ¿ahora quién soy yo?

viernes, 8 de enero de 2010

Diario de abordo.
Día 40. No hay cambios de referencia pero si de rumbo. No me rindo ante la adversidad.
Debajo de este cielo oscuro he empezado a ver estrellas, mi rosa de los vientos sigue a mi lado y cada día dirige mejor mi dirección. He sobrevivido a los peores tiempos para poder adentrarme en los mejores.
Y aquí de nuevo asolado en la no tan rotunda oscuridad sonrío mientras me desvanezco y reconozco mi propia suerte sin rechazarla.