domingo, 19 de julio de 2009

Y es ahora cuando soy libre, he dejado de tener miedo por lo único que me ha hecho abrir los ojos en mitad de la noche y temblar.
He dejado de pensar de una forma absurda para intentar crecer. He comprendido que necesito mas, para poder querer algo.
Ojalá me hubiese dado cuenta antes de que el valor se forja en el mismo sitio donde los sueños, donde la esperanza y ante todo donde la soledad.
Y ya he derramado mis últimas lágrimas, aunque no me arrepiento de haber llorado. Pues ahora comprendo. Comprendo que las palabras nunca dejan de ser más que palabras, y nunca dejaron de serlo.
Da alegría poder pensar, da fortaleza eso de dirigirse hacia el mundo tanto desde dentro como desde fuera..
Es enorme el peso que ha dejado de caer sobre mi vida. Y ahora mas que nunca recalco que es mía. Pues ahora soy feliz, pues se no puedo perder nada de lo que tengo.
Nadie puede quitarme nada, pues nada tengo.