jueves, 2 de julio de 2009

Has de saber que se te da muy mal, eso de hacer como que no te sonrojas cuando se cruza mi mirar. Eso de esconder las manos si te empiezas a temblar, y sabes de sobra que lo que niegas, tus ojos no lo pueden ocultar.

Siempre sentiste cuando mi mano te iba a rozar, que tu cuerpo se estremecía y no podías ni pensar. Siempre has sabido que nadie lo debía notar, que tus lágrimas ocultas no las ibas a destapar.

Te autoconvences de que no soy yo la que te hace sudar, que no es mi pelo lo que siempre hueles, ni añoras mi aroma al besar.. te repites que mis labios nunca mas te van a excitar..

Pero siento decirte que hasta los poros de tu piel me quieren hablar, diciendome que solo están vivos cuando me sienten llegar.

Desahogas tu lujuria pero sabes que no es difícil de demostrar, que nunca te has derretido como cuando es mi saliva lo que te ha de alimentar.

No añoro tus besos, aunque nunca podría negar que cuando pienso en tus suspiros no puedo evitar temblar.